Cada vez nos enamoramos más de las bodas, ¿por qué? Simple y sencillamente porque los novios se arriesgan a crear entornos mágicos y plagados de hermosos detalles. La boda de Jess y Rodrigo, por ejemplo, no fue la excepción. Esta ceremonia nos fascinó por la estética tan perfecta que construyeron en torno a un día especial: colores vivos, estampados, tonos hipster chic y los más emblemáticos acentos de estilos bohemios. Todo, además de la historia de amor, ¡fue simplemente perfecto!
En esta boda en específico, el estilismo de la novia nos fascinó. La belleza natural de Jess brilló a la distancia con un look que apostaba por un estilo bohemio y completamente rústico, sin dejar de lado la elegancia. El vestido de novia fue el mejor modelo en tendencia: un diseño de telas exquisitas, caída fluida, mangas largas, cuello conservador y cientos de hermosos detalles sutiles. El “something blue” fue elegido en un par de hermosas flats, mismas que combinaron a la perfección con una corona de flores perfectamente diseñada y brillante en colores enérgicos. Para el peinado y maquillaje, la naturaleza en los colores y la suavidad de las ondas en la melena ¡fueron geniales!
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Rodrigo, por otra parte, rompió con todos los esquemas del novio tradicional. Su propuesta de look nos fascinó, y más aún con la incorporación de colores intensos y enmarcados en una esencia imponente y divertida. El traje, elegido en un tono verde pino fue genial para ensalzar la unicidad de su persona; sin embargo el detalle que más nos gustó fueron los calcetines con un interesante estampado de zorros. El boutonniere siguió la armonía decorativa de la boda, apostando por la integración de tonalidades en gamas de amarillos, propia de los hermosos girasoles. Inspírate también en la Real Wedding de Mercedes y Edmon en Hacienda Puerto de Sosa.
Esta ceremonia, fotografiada por la increíble lente de Fer Juaristi, estuvo plagada de tonos brillantes, combinaciones arriesgada y un entorno sin complicaciones. El rito religioso, por ejemplo, se llevó a cabo en una locación sin muchos detalles, en la que simplemente los novios se encargaron de brillar gracias a su personalidad y a la historia de amor que los unía (y ahora más). La recepción, de igual modo, rompió con la tradición llevándose a cabo en un lugar escondido que proveía un entorno hogareño con tintes rústicos en la madera, así como elegancia en su ambiente.
Al término, Jess y Rodrigo disfrutaron de una sesión privada, en donde los derredores londinenses y lo mejor de la naturaleza hicieron las veces de marco perfecto para esta boda única y sin precedentes. Recuerda que tu boda puede convertirse en un experimento majestuoso, así que inspírate en la ceremonia de esta original pareja de novios, imagina tu día perfecto y ¡echa a volar tu imaginación! Jamás te arrepentirás.
Fotos cortesía de Fer Juaristi
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